El agua y el gas en Malta.
La media de lluvia en Malta apenas llega a los noventa días al año, por lo que, sin ríos ni pantanos, el agua doméstica en Malta proviene básicamente de la desalinización.
Nos encontramos pues ante otro proceso nada barato en cuanto a su producción. Si bien el agua que llega a las casas es considerada como segura y potable, sabe rara y es bastante fácil que no le sienta bien a las personas que llegamos de fuera, por lo que te recomendamos que bebas agua embotellada y así podrás evitar si eres delicado del estómago.
En cuanto al gas, en Malta no hay gas natural y gran parte de las casas tienen cocinas de gas butano. Esta es otra de las cosas que debes tener en cuenta a la hora de alquilar un piso: si tu cocina es de gas, pedirle al dueño que te muestre donde está la bombona, que te enseñe a cambiarla si nunca has utilizado este tipo de cocina e intentar si tienes suerte que te deje una de recambio para que no te quedes sin gas cuando se acabe la que está puesta./p>
En lo positivo, cocinar con gas butano es más barato que con electricidad, pero en lo negativo, el sistema de distribución no es el más moderno del mundo, así que con el butanero se genera una relación de odio especialmente en dos situaciones: 1ª) Cuando tienes gas. 2ª) Cuando no tienes gas.
Cuando tienes gas lo que odias es a ese pedazo de butanero tocando la bocina del camión a las 7:30 am, como que Malta hubiese ganado el Mundial. Aquí los repartidores como el panadero o el butanero, anuncian su llegada a base de bocinazos y, claro, un pedazo de camión como el del butano, va a juego con un pedazo de bocina que parece la del Titanic zarpando, así que una vez a la semana tendrá un desagradable despertador sonando a la puerta de tu casa.
Cuando no tienes gas, por supuesto que odias al butanero porque siempre se te acaba en el peor momento y debido a que pasan una vez a la semana, si te quedas sin gas justo después que ellos pasaron, deberás ir con tu bombona de gas a cuestas directamente a las tiendas de barrio a cargarla.
Por último, otra cosa positiva del butano es que suele durar un montón y el precio oscila entre los 15 y los 20 € por bombona, así que es de los servicios más baratos. Eso sí, siempre que vayas a comprar una bombona nueva deberéis llevar la vacía porque si no te cobrarán un depósito a mayores (este depósito es reembolsable siempre que guardes el ticket y se lo des al butanero cuando devuelvas la bombona).