UNA AVENTURA
GASTRONÓMICA
PARA LOS ESTUDIANTES
La comida callejera en Malta es una experiencia que todos los jóvenes latinoamericanos deberían explorar, especialmente aquellos interesados en estudiar inglés en el extranjero. Este artículo te llevará a un recorrido por los sabores únicos de la comida maltesa.
PASTIZZI: EL ÍCONO DE LA COMIDA CALLEJERA MALTESA
Los pastizzi son, sin duda, la estrella de la comida callejera en Malta. Estos hojaldres crujientes, típicamente rellenos de ricotta o guisantes especiados, son un alimento básico que se puede encontrar en casi cada esquina del país. Su precio accesible (alrededor de 50 centavos a 2 euros) los convierte en una opción perfecta para estudiantes con presupuesto limitado. Se pueden disfrutar a cualquier hora del día, especialmente como desayuno o merienda.
FTIRA: UN PLATO TRADICIONAL Y VERSÁTIL
La ftira es otro plato emblemático que debes probar. Este pan plano, similar a una focaccia, se sirve con una variedad de ingredientes como atún, aceitunas y alcaparras. Es perfecto para llevar y disfrutar junto al mar, lo que lo convierte en un snack ideal para los jóvenes aventureros que exploran las playas de Malta
FENKATA: EL CONEJO MALTÉS
Si estás buscando algo más sustancioso, no puedes dejar de probar el estofado de conejo, conocido localmente como fenkata. Este plato tradicional se prepara con carne de conejo marinada y cocinada lentamente con verduras y vino. Es un símbolo de la gastronomía maltesa y se puede encontrar en muchos restaurantes y mercados locales
MERCADOS LOCALES
Visitar los mercados locales es una excelente manera de sumergirse en la cultura maltesa y degustar platos típicos. El Mercado de Is-Suq tal-Belt en La Valeta ofrece una variedad de productos frescos y comidas tradicionales que te permitirán experimentar la auténtica cocina maltes. Además, el mercado de Marsaxlokk, famoso por su pescado fresco, es ideal para disfrutar de un almuerzo al aire libre.
DULCES MALTESES, UN FINAL PERFECTO
No puedes dejar Malta sin probar sus deliciosos postres. Los imqaret, pasteles fritos rellenos de dátiles, son un dulce típico que se encuentra fácilmente en las calles. También están los kannoli, canutos rellenos de ricotta dulce, perfectos para satisfacer cualquier antojo.